El poder (1 de 2)

 

El sistema le quitó al ser humano el poder de obtener lo que desea cuando lo convenció de que puede comprarlo.

 

 

 

Más sobre el taller de ampliación de conciencia

 

Seguir acumulando conocimiento, esperando que así se produzca el despertar de nuestra conciencia, es como acumular semillas esperando que así nazca un árbol.

 

Podemos seguir acopiando semillas, y nada sucederá.

 

La acumulación sólo cambia la cantidad. Para cambiar la calidad, hace falta la transformación. Y para generar el milagro de la transformación alcanza con una sola de las semillas que guardamos en el depósito.

 

Una modificación en la forma de ver las cosas nos permitiría descubrir que, si le damos las condiciones propicias para que germine, una sola semilla, por pequeña que sea, tiene la fuerza de crear un árbol. Y entonces veríamos, también, que teníamos mucho más de lo que necesitábamos.

 

La idea de este taller no es agregar un nuevo conocimiento, una nueva idea, un nuevo dato. Nuestra conciencia no necesita más de eso. De hecho, la hemos sobrecargado con mucho más de lo que hacía falta.

 

El trabajo en el taller consiste en crear las condiciones propicias para que alguno de esos conocimientos que ya tenemos, alguna de esas ideas maravillosas que ya atesoramos, tenga la oportunidad de germinar... y así la conciencia se transforme.

 

La duración es de tres meses (septiembre a noviembre), con encuentros de una vez por semana, en Tigre, provincia de Buenos Aires, Argentina.

 

Estamos terminando de armar los grupos esta semana, para arrancar la que viene.

 

Hay proyectos de iniciar otro taller a principios del año que viene, para los que no pueden ahora, y también de llevarlo a otros países, cuando llegue el momento.

 

Mi nombre es Gustavo, y soy el autor de "El ZENtido de la Vida".

 

Para averiguar sobre fechas, horarios y lugar, mándenme un mail a lufillol@yahoo.com.ar

 

Saludos.

 

 

 

Forma de hablar

 

Si escuchas a diferentes seres despiertos, me dijo un verdadero maestro, encontrarás una característica que se repite en todos ellos: su manera de expresarse no es atolondrada y mecánica, sino pausada y reflexiva.

 

Si lees libros sagrados de diferentes culturas, me dijo, encontrarás un símbolo que se repite en todos ellos: el Creador mide cada una de sus palabras cuando le da forma al mundo.

 

Si ordenas tus palabras, concluyó, el mundo que estás creando será ordenado. Si hablas de manera inconsciente y precipitada, tu mundo será un caos.

 

 

 

Taller de ampliación de conciencia

 

Hay mucho más de lo que captan nuestros oídos, limitados a un rango específico de sonido. Y hay mucho más de lo que captan nuestros ojos, limitados a un rango específico de luz.

 

Lo mismo pasa con nuestro olfato, nuestro gusto y nuestro tacto.

 

Y eso que ocurre en nuestra percepción del mundo exterior, sucede exactamente igual en nuestra percepción del mundo interior. Sólo captamos los sentimientos, emociones y pensamientos que pertenecen a un rango específico, dictaminado por nuestro estado de conciencia.

 

Pero hay una diferencia fundamental entre los sentidos, enfocados hacia el exterior, y la conciencia, dirigida hacia el interior: el rango que limita a la conciencia puede expandirse.

 

Ampliar la conciencia es ampliar la percepción de los sentimientos, emociones y pensamientos que nos atraviesan. Es empezar a ver, dentro de nosotros, lo que antes no captábamos.

 

Existe un método para lograrlo. Yo lo recibí de maestros hace tiempo, y ahora siento que he profundizado en ello lo suficiente como para estar en condiciones de compartirlo.

 

Si a alguien le interesa, estaré dando un taller de tres meses (septiembre a noviembre), con encuentros de una vez por semana, en Tigre, provincia de Buenos Aires, Argentina.

 

Mi nombre es Gustavo, y soy el autor de "El ZENtido de la Vida".

 

Para averiguar sobre fechas, horarios y lugar, mándenme un mail a lufillol@yahoo.com.ar

 

Saludos.

 

 

 

Instrucción para resolver un conflicto

 

"Cuando tengas un conflicto", me dijo una gran amiga, "no se lo des al ego para que lo resuelva. Dáselo al alma".

 

 

 

Nunca infeliz

 

¿Por qué podemos fácilmente concebir que alguien a quien le ocurre algo desgraciado, usualmente vinculado con la muerte, nunca más pueda ser feliz, pase lo que pase, y en cambio nos cuesta concebir que alguien a quien le ocurre algo agraciado, usualmente vinculado con la vida, nunca más pueda ser infeliz, pase lo que pase?

 

 

 

Libertad de conciencia

 

En una charla reciente, un amigo me confesó algo que transcribiré lo más fielmente posible. No cito su nombre, porque no estoy seguro de que el relato haya sido exactamente así, y no quiero poner en su boca palabras que no dijo... pero creo que se entenderá la idea.

 

Mi amigo me reveló que cuando era chico tenía inquietudes espirituales, que lo llevaban a querer averiguar e investigar más allá de lo que le brindaba su formación religiosa.

 

Yo viví algo parecido a una edad parecida, pero lo viví con culpa.

 

Él, en cambio, lo vivió con una libertad de conciencia que me resulta admirable.

 

En lugar de temer que su sed de evolución espiritual lo desviara del camino marcado y lo arrastrara al infierno --como me ocurría a mí, siempre tan miedoso--, él me contó que cada noche se iba a dormir pensando que, cuando muriera, Dios lo estaría esperando con los brazos abiertos y le diría:

 

"Hijo mío, tal vez no me hayas encontrado a lo largo de tu vida; quizás te hayas equivocado y confundido... pero te recibo con alegría, porque reconozco que me has buscado".

 

 

 

Una piedra

 

La mente racional es una herramienta extremadamente útil en el plano físico, dijo una amiga del alma, pero inútil en el plano espiritual.

 

No hay que permitirle al ego, apegado a lo material, utilizar la razón para desacreditar nuestras inquietudes espirituales. No hay que permitirle descartar nuestras intuiciones porque carecen de lógica.

 

Nada tiene que hacer la lógica en este terreno.

 

Internarse en lo espiritual desde la lógica, es como embarcarse en el mar sobre una piedra.

 

 

 

El juego y el fracaso

 

El que diseñó el juego de la vida probablemente haya tenido en cuenta esto que aconseja Will Wright, creador de SimCity, Spore y The Sims: "Lo que hace interesante a un juego es el fracaso. Esa es la primera lección para un diseñador. Si el jugador supera una prueba, inmediatamente debe fracasar en otra. Es la única forma de mantenerlo motivado. Nada hay más aburrido que un juego en el que sólo se tiene éxito".

 

 

 

¿Con qué autoridad?

 

¿Con qué autoridad exigimos que el mundo exterior sea coherente, si nuestro mundo interior está plagado de incoherencias?

 

 

 

Diálogo en el averno

 

"Jefe", le anunciaron al Diablo en las tinieblas, "los humanos están empezando a escuchar un mensaje contrario al nuestro".

 

"No debemos preocuparnos", respondió Satán. "Ya van a inventar una religión para arruinarlo".

 

 

 

El hombre en el espejo

 

“Voy a empezar con el hombre en el espejo. Voy a pedirle que cambie su forma de ser.

Si quieres mejorar el mundo, mírate a ti mismo y realiza un cambio”. 

 

"Man in the Mirror"

Canción escrita por Glen Ballard y Siedah Garrett. 

Popularizada por Michael Jackson.

 

 

 

Eso no es progreso

 

Surgen nuevos medios, nueva tecnología, nuevas generaciones... y el sistema permanece inalterado.

 

Eso no es progreso.

 

 

 

Pensamiento

 

El pensamiento humano se distingue del de cualquier otro animal por su carácter transgresor, me dijo un verdadero maestro.

 

La inteligencia humana se diferencia de la de cualquier máquina por su carácter rebelde.

 

Si el pensamiento no intenta de vez en cuando romper alguna barrera, sobrepasar algún límite, va volviéndose día a día más primitivo y mecánico.

 

Si la inteligencia no intenta de vez en cuando vislumbrar algo nuevo, concebir algo distinto de lo conocido, va perdiendo día a día su condición humana.

 

 

 

Algo más sobre la necesidad de otros...

 

Escuchado de una amiga del alma:

 

Imponerse, defenderse, intentar agradar... son maneras de buscar energía de los demás. El problema es que, para obtener energía externa, uno tiene que ceder energía propia, que es la única energía que a uno le sirve.

 

La fuente de energía propia es interna. Nada externo puede dárnosla... y en cambio podemos perderla, tratando de obtener energía de los demás.